miércoles, 17 de junio de 2015

Carta a mi amor no correspondido... <(3

¡Hola a todos!... amigas y amigos que leen mi blog.
En esta ocasión les comparto un escrito que va dedicado a todos esos "amores no correspondidos", que sé, muchos humanos tenemos...
Es un poema en forma de carta y reflexión, que intenta reunir y plasmar, en sus versos, todos esos sentimientos, tanto positivos como negativos, que llegamos a experimentar, gracias a esos "malos amores"...
Espero que les guste... ;) ... : 




"Hola, amor mío... mi amor...; desamor mío... mi desamor...
Quizá esta carta te sorprenda, pero, creéme, a mí me sorprende más...
Al fin lo decidí...; por fin tuve el valor de escribir todo lo que siento, en débiles estrofas, que el viento puede romper... pero que, sin duda, para nuestros corazones son más fuertes que una roca...
No sé cómo empezar... no sé con qué iniciar esta horrible letanía... 
Sabes que te quiero, sabes que te amo... y más aún, sabes que te admiro con locura, pasión y ternura.
Sabes que todo lo entregué...; en tus manos dejé mi vida, anhelando protección, cuidado y armonía... pero, por alguna razón u otra, todo terminó echo pedazos, en medio de caos y destrucción...
¿Quién tuvo la culpa?... no lo sé... y no importa... 
Lo importante es reconocer que ya nada es igual... y que, quizá, nunca más lo será...
Pides que te entienda... pido que me entiendas... pero no, no nos podemos entender...
Tú esperas que regrese aquel amigo que escuchaba, consolaba y orientaba...; yo anhelo que vuelva y se mantenga aquel amante que a mi cuerpo y alma hacían vibrar...
Ese amigo que deseas, hace mucho se murió... y está enterrado en lo más profundo de mi razón...; ese amante que yo espero era sólo una ilusión efímera, carnal y sin sentido... simple y vago deseo que no llena al corazón... ese amante, hace mucho, desapareció... se lo llevó la cordura... al viento, lanzado, se apuntó... en un vil suicidio, tratando de engañar al tiempo y a nuestras emociones...
Ya no soy tu amigo...; ya no eres mi adoración...; ¡ya no somos nada!... 
Ha llegado nuestro tiempo... ¡nuestro tiempo de decir "adiós"!, de una vez por todas y para siempre...
Me haz dicho, más de una vez, que "en el corazón no se manda"... 
Y eso es lo mismo que yo te digo hoy, antes de concluir, con lágrimas, esta triste carta de despedida... 
Sin amor, ni rencor, ni malas vibras, me despojo de ti... y te despojo de mí... 
Deseo que seas feliz... y que encuentres todo eso que tanto anhelas...; todo eso que no encontraste en este humilde servidor...
Yo, por mi parte, prometo, desde ahora, ser fiel, y guardar luto a "mi amor que nunca fue"... 
Adiós... ¡hasta nunca, mi sabroso delirio!... mi endulzada tentación...".


Bueno, espero que la carta haya sido de su agrado, y que se animen a "liberarse" de esa "amarga ilusión"...

¡Nos leemos después!... si la naturaleza así lo permite... ¡hasta entonces!... :) / 


  

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